Mi Pasión

He dedicado parte de mi existencia a que las personas puedan vivir una vida basada en el liderazgo, el amor, la empatía y lo más preciado de la vida: las relaciones. También he tratado con personas de todos los estatus sociales (por más de 20 años), teniendo bajo mi conocimiento estrategias que te permitan mejorar tus finanzas personales y empresariales. Pero todos sabemos que esto no es lo más importante, porque cuando lo importante se da, la vida cobra sentido y con eso, nuestra cara iluminada que nos permite avanzar, aunque nunca antes lo hayamos hecho, aunque se presenten los oponentes más difíciles.

Sin embargo, para otras personas, la historia no es la misma. Porque cuando tu vida no tiene sentido, no es sustentable o te volviste un ser insoportable, lo que sientes es que no tienes nada. Puesto que no sientes lo que tienes, y sin importar la edad, el dinero que tengas o la pareja que tengas, eso es insoportable. Y es aquí cuando nacen dos tipos de personas: las personas con sobrepeso, algunos de ellos adictos o simplemente solos, nadie los quiere ver. La otra persona sabe que tiene que entrenarse y esperar lo mejor de la vida. Sabe que lo mejor de la vida no sucede porque se da, sucede porque tú haces que suceda. La felicidad, la pareja, el dinero, la salud no se da. Es algo que sucede porque depende de ti y tiene que ser provocado por ti. Si no, terminas padeciendo a lo que tanto le temes: una vida sin sentido y dirección. (Vacío existencial)